Despejar la mente [Libre]

Perdia el control, eso no era de mi agrado. Durante años habia trabajado con Baion por un bien común, creía que ese negocio tenia un futuro plenamente asegurado, pero ahora, con el poder en nuestras manos me daba cuenta de lo equivocado que estaba, los Greyback no habian sido ni serian nunca gente de fiar, no tanto por ser licantropos, pues habia algunos muy eficientes, pero esa maldita arrogancia que los caracterizaba era una gota mas en el vaso de mi paciencia, el cual, tras 5 años estaba a punto de derramarse. Ahora estaba lo de las fugas...

Suspiré y doblé en la siguiente esquina, adentrandome en el callejón K. Ultimamente tan visitado como el callejon D. por brujas y magos por igual, detestaba eso y extrañaba el mortifero silencio de ese sucio y triste callejón oscuro.

Caminaba por el callejon sin nada mejor que hacer, se suponia que no debia siempre me habian dicho que no debiair a ese lugar,pero ahoramucha gente iba asi que poruqe no ir tambien, caminaba distraida mirando las tiendas, antes de irme habia ido una vez y ya no recordba como era, doble en una esquina y choque con alguien, rayos siempre me pasaba lo mismo, era algoquenopodia evitar

-Disculpe

Dije apenada mirando con quien habia chocado con una ligera sonrisa en los labios

Alguien chocó contra mi, gruñi por lo bajo y miré directamente al rostro de la descuidada persona que se había topado conmigo, era una mujer, una por cierto, muy bella.

Deberias tener cuidado

Espeté con frialdad, viendola con indiferencia, no tenia ni idea de si ella sabia quien era yo, pero la verdad era que poco me importaba, fuera yo quien fuese, era descortez chocar asi con las personas... Bah! Conmigo era peor, casi una blasfemia.

Lo escuche y frunci el seño, ¿quien se creia que era para hablarme asi?

-No fue solo mi culpa, señor, usted tambien venia distraido si no me hibiese visto y hubiese evitado esto

Dije tranquila sin dejar de miaralo

Enarque una ceja, vaya que tenia pantalones la niña esta, definitivamente no sabia con quien diablos estaba tratando, ya la pondria en su lugar, sonreí de lado.

¿De casualidad te suena el nombre de Richard Lovecraft?

Le pregunté con ironía, fuera de la ciudad o no, debía conocer mi nombre, el profeta hablaba de la familia Lovecraft y Greyback en cada edición, fuera para criticar o alabar, generalmente lo segundo. Nosotros manejabamos el mundo mágico y aparte de todo, era yo el director de Hogwarts.

Escuche el nombre y me quede pensando, lo mire de arriba a abajo y negue con la cabeza

- Lovecraft, seuro me suena pero no se de donde

Dije encogiendome me hombros, aunque parecia que él tenia poder, ¿quien seria? Debia de haber leido mas el periodico

Director de Hogwarts, patriarca de la familia Lovecraft, esposo de la primer ministro, Alice Stone

Enumeré y puse los ojos en blancos, esta chica si que estaba desubicada completamente.

¿De donde eres?

Pregunté, poco le faltaba para tener un enorme letrero en la frente que citara "EXTRANJERA" y francamente poco me extrañaría que me dijera "¿Me indicaría como llegar a la Orden del fenix?" Sonrei de lado, a causa de mis propios pensamientos.

Asi que era esposo de la ministro bueno eso explicaba el porque de su comportamiento altanero

-Deberia decir un gusto pero dadas las circunsancias no lo es.

Dije tranquila, aqui seguia yo y mi gran bocota metiendome en problemas.

-De Londres, pero si lo pregunta porque desea saber porque no lo conozco bueno pues porque estuve fuera un tiempo.

¿Y no has pensado en volver a irte de viaje?

Incité entrecerrando ligeramente los ojos, viendola con seriedad, parecía que esta chica tenía un sincero interés por causar la peor impresión posible en mi persona.